En esta entrada se tratará la resolución de conflictos, puesto que es un tema que en el aula de infantil se suele ver a diario.
¿Cómo actuarías si dos alumnas pegan a un compañero y le rompen su juguete?
Para resolver este tipo de conflictos, primero nos acercaríamos al alumno al que le han pegado y le han roto el juguete para ver cómo está y así poder tranquilizarlo. Después iríamos a preguntar a las dos alumnas el porqué de su actuación, para así llegar a comprender el motivo y saber cómo se han sentido mientras hacían esta acción a su compañero. Tras saber la situación en la que se encuentran las dos niñas que han actuado mal, les diremos que intenten ponerse en la situación que ha vivido el compañero que lo ha vivido, ya que lo ha pasado mal. Les diríamos que nunca hagan algo que no les gusta a ellas que les hagan. Y por último, aplicaríamos la técnica del sándwich, es decir decirles algo positivo, después algo negativo y para acabar algo positivo de nuevo.
Es fundamental, que mantengamos como docentes la calma ante este tipo de conflictos, puesto que si nosotros perdemos la calma los niños también la perderán, ya que somos los docentes la mayor autoridad en el aula. Debemos ver este tipo de situaciones como algo normal, porque son niños, y no debemos hacer del conflicto un drama, sino saber aprovechar estas situaciones para que los niños sepan cuáles son las normas de respeto hacia los demás y saber cómo actuar ante una situación parecida, sin violencia verbal ni física, sino con calma y respeto, ya que es algo que nos gusta recibir a todos.
También podríamos aprovechar este tipo de momentos para hacer actividades que ayuden a los niños a saber resolver los conflictos, como por ejemplo:
Actividad: "El tablón cabreado"
1. Nos sentamos en la asamblea en círculo y discutimos sobre qué es sentirse enfadado, molesto o cabreado.
2. Después los niños cogerán cartulinas/ folios y dibujarán aquello que más les haga enfadar o algo que no les guste.
3. Tras tener cada uno su dibujo, iremos de nuevo a la alfombra de la asamblea e iremos comentando los dibujos, así cada niño expresará qué le hace estar cabreado y cómo se siente en cada momento.
La maestra aprovechará este momento para hacer diferentes preguntas como:
- ¿Qué hacéis cuando alguien o algo te molesta?
- ¿Qué piensas mientras estás cabreado?
- ¿ Cómo podríamos resolver este problema?
4. Por último pegaremos los dibujos en un tablón para poder recordar lo que no nos gusta que nos hagan a nosotros ni al compañero y poder evitarlo.
De esta manera aprovechamos cada pregunta y cada instante para enseñarle a los niños qué deben hacer y cómo actuar. También podemos aprovechar para recordar la técnica de la tortuga.